Ya lo habían anticipado la semana pasada en un megaevento realizado en La Rural de Palermo junto con toda la ofensiva de modelos que participarán del Motor Show 2017.
Pero esta vez, los responsables de Citroën Argentina decidieron doblar la apuesta y llevaron más de 30 unidades de su nuevo C4 Cactus a una travesía por increíbles paisajes de las provincias de San Juan y La Rioja para que la prensa especializada tuviera un primer contacto con el novedoso modelo francés.
Importado desde España, el diseño del C4 Cactus ($448.000, precio de preventa al público), combina el cuerpo y las líneas que caracterizan tanto a un SUV (Sport Utility Vehicle) como a un vehículo crossover.
Quizás sea esa difícil ubicación lo que más seduce del C4 Cactus, ya que es único en su especie y bastante complicado de catalogar. Lo único cierto es que no pasa desapercibido en ningún ambiente…mucho menos en la Tierra de Dinosaurios donde se realizó la extensa prueba de manejo en el norte argentino.
Entre sus innovaciones, sobresalen los airbumps laterales, una suerte de airbag ubicados sobre las puertas que refuerzan su particular estilo y protege a la carrocería de esos golpes o toques de la vida cotidiana en el tránsito.
El C4 Cactus, además, recrea a la vista con sus coloreadas carrocerías en celeste pastel, amarillo, blanco tiza y negro brillante. Con un paso de 1.050 kilogramos y su estética vanguardista, asombra también por su motorización.
Se trata del propulsor PureTech 110, el primer motor de tres cilindros del grupo PSA que suma un turbo e inyección directa, de 1.2 litros y una potencia máxima de 110 CV, asociado a una caja automática de 6 velocidades.
En su interior se repite el estilo moderno y personal con una interfaz de conducción digital, un habitáculo amplio y conectado, y con una pantalla táctil de 7 pulgadas que informa datos de conducción y comanda desde el climatizador hasta el audio.
Las butacas delanteras están inspiradas en el estilo de modernos sofás (anchos y cómodos), los sapitos del limpiaparabrisas salen desde las escobillas y el airbag del acompañante se ubica en el techo, lo que permite contar con una guantera más amplia y “extraña” por su forma externa.
Justamente, en lo referente a la seguridad, el C4 Cactus ofrece seis airbags, Control de Arranque en Pendiente, luces delanteras direccionales (se mueven para iluminar las curvas) y Control de Estabilidad, entre otros sistemas.
En síntesis, el Citroën C4 Cactus es un canto a la esperanza en materia de diseño, con un interior que exhibe materiales de calidad con diferentes texturas y colores, y un motor equilibrado, tanto para andar por la ciudad como por las rutas argentinas.